Jorge Rojas desató una fiesta emotiva en nuestra capital

Plinio López
Jorge Rojas agotó todas las localidades del Centro Cultural “Martín Fierro” en un recital de más de dos horas donde repasó sus grandes éxitos y conmovió al público con un relato íntimo sobre su conexión con la provincia y su viaje musical.
Una noche cargada de emoción, música y un público que coreó cada canción vivió este viernes el Centro Cultural “Martín Fierro”, escenario del recital “Gira 20 Años” de Jorge Rojas. El cantante salteño desató una verdadera fiesta ante un auditorio colmado, en un espectáculo que combinó un imponente despliegue escénico con momentos de gran intimidad.
La velada comenzó pasada las 21.30, cuando Rojas subió al escenario para abrir el fuego con “Voy a abrir mi corazón”. Así dio inicio a un viaje musical de más de dos décadas, recorriendo un repertorio que incluyó éxitos como “Vuelvo”, “Andando”, “Milagro de amor”, “La vida” y “Entre espinas y flores”, entre otros, los cuales fueron cantados a pleno pulmón por el público.
JORGE ROJAS | CANTANDO CON EL PÚBLICO.
En un momento de pura emoción, tras una ovación de pie, el artista se dirigió a sus seguidores y confesó: “Creo que no hace falta que se los diga, ustedes se dan cuenta lo que siento cuando canto”. Reflexionando sobre su trayectoria, Rojas agregó: “Es emocionante cada vez que interpreto una canción, es un viaje emocional (…) y hay un preciso instante en el que vamos en el mismo tren de esa ilusión”. El músico también reveló su especial vínculo con Jujuy, contando que tiene familia en la provincia y que su padre se casó allí.
El show, que superó las dos horas de duración, ofreció un recorrido por 48 canciones. Rojas dedicó un espacio a un set acústico con temas como “No Saber de Ti” y “Locura”, Por si volvieras, la luna sin ti, como vivo sin ti, sin palabras entre otros. para luego dar paso a la fiesta final con ritmos más vibrantes como “Sayera” y “No te vayas carnaval”.
FELIZ | EXPLICÓ LO QUE PARA ÉL SIGNIFICA CANTAR.
El despliegue técnico fue un protagonista más de la noche, con un impecable trabajo de sonido, iluminación y visuales que enriquecieron cada interpretación. La banda estable y el grupo de bailarines aportaron solidez, calidez y una cuota de energía que hizo vibrar el teatro.
Con la esperanza de un pronto regreso a los escenarios jujeños, Rojas selló una noche inolvidable que confirmó no solo la vigencia de su música, sino también la profunda conexión con su público.
Fuente: eltribunodejujuy.com



